– ¿Manuel, qué haces con un andador?
– Ay hija, no sabes lo que me ayuda a moverme con seguridad por la casa y en la calle.
– ¿Y este llavero tan moderno?
– No es solo un llavero, es un localizador de llaves. No pongas esa cara, te sorprenderías de la oferta de productos para personas mayores que hay actualmente en el mercado.
– Ahora mismo busco uno para mi padre que no ganamos para copias de llaves. Vamos a una por mes.
– ¿Y no abre el portal con el móvil? Yo tengo mi Qvadis® One que me permite acceder a la vivienda con un clic y dar acceso a las visitas respondiendo al teléfono. Encantado no, lo siguiente.
– ¿Cómo? Manuel, te estás volviendo un moderno que no veas.
– Moderno, cómodo y seguro, ¡y mis hijos encantados!
Pondría la mano en el fuego sin riesgo a quemarme por que todos tenemos un Manuel en nuestras vidas. Una persona mayor, que vive sola, y que puede tener dificultades para desplazarse, cocinar, comunicarse u otras tareas domésticas, es decir, las actividades cotidianas de su día a día.
Para mejorar su calidad de vida, valerse por sí mismas y ser más autónomos existen una serie de productos para personas mayores, sean más o menos dependientes.
Hacerles la vida más sencilla
A menudo, a estos productos les añadimos el sufijo “de apoyo” para referirnos a todos aquellos dispositivos, objetos o equipos que puedan ser útiles para superar las barreras que limitan la realización de actividades cotidianas.
¿A qué nos referimos con “hacerles la vida más sencilla”? Estos productos se han diseñado para paliar esas dificultades, facilitarles la participación, evitar el aislamiento, prevenir nuevas deficiencias o proteger, apoyar o sustituir alguna función corporal.
No solo sirven de ayuda para las personas mayores, sino también a sus familiares y cuidadores a su cargo.
Llegados a este punto podríamos entrar ya en materia y hablarte del catálogo de productos que puedes encontrar en el océano digital, como el del Centro de Referencia Estatal de Autonomía Personal y Ayudas Técnicas (CEAPAT) o en el Sistema de Información de Productos de Apoyo (SIPA) clasificados en distintas categorías, según usos y necesidades médicas, habilidades, capacidades y autonomía.
Asesorarse antes de comprar
Sin embargo, antes de lanzarse a la búsqueda de un producto salvador para mejorar la calidad de vida de nuestros mayores, debemos insistir en la importancia de un asesoramiento previo por parte de un profesional sociosanitario. Este evaluará el estado, capacidades y necesidades de esa persona, y podrá recomendar el producto o productos adecuados para cada caso concreto.
Por ejemplo, este profesional nos puede ayudar a decidir si a nuestro padre/abuelo le conviene más un bastón o un andador, teniendo en cuenta su estado y la función que queramos que haga ese producto.
¿Qué tipos de necesidades tienen?
Para poder mejorar realmente la vida de nuestros mayores hay que tener claro sus problemas y sus necesidades, y formularse una serie de preguntas de este estilo:
- ¿Cómo se apaña para limpiar la casa?
- ¿Cómo hace su aseo personal?
- ¿Está adaptado el dormitorio y la cama para su bienestar?
- ¿Tiene problemas para vestirse, atarse los zapatos o mantener el equilibrio?
- ¿Llega cómodamente a todos los objetos de la vivienda?
- ¿Puede leer las etiquetas e instrucciones de los productos?
- ¿Está familiarizado con la tecnología y el uso de electrodomésticos?
Con esta información ya podremos buscar productos concretos enfocados a estas problemáticas, o hasta renovar el mobiliario de la casa para que puedan valerse por sí mismos o con un poco de ayuda de familiares o asistentes.
Si estás interesado en saber qué productos existen para personas mayores con cierto grado de dependencia te recomendamos que eches un vistazo a esta entrada que publicamos en el blog.
Sea cual sea la situación de dependencia o autonomía de este colectivo recuerda que puedes solicitar algún tipo de ayuda a través de la Ley de Dependencia o LAPAD que gestionan las diferentes Comunidades Autónomas.
Innovaciones para mejorar su calidad de vida
Los avances tecnológicos han supuesto un antes y un después para toda la sociedad, también para nuestros mayores: móviles intuitivos y adaptados a sus necesidades básicas, sillas de ruedas inteligentes, sensores para controlar y monitorizar salud, audífonos y gafas inteligentes, cámaras de vigilancia, sensores de movimiento y el Internet de las Cosas (IoT).
Sí, has leído bien. Las personas mayores de 65 años utilizan cada vez más Internet de forma habitual y diaria, hasta un 50% según un informe del Instituto Nacional de Estadística.
Veis como el caso de Manuel no es un caso aislado. ¿Cuántos de vuestros padres o abuelos no tienen aplicaciones en sus móviles para comunicarse con vosotros o mejorar su accesibilidad?
La tecnología es uno de los productos para personas mayores que más puede ayudarles a mejorar su calidad de vida, como ya os comentamos en esta entrada.
¿A qué esperas para adquirir un Qvadis® One y descargarle la aplicación en su móvil?
