La verdad es que puede ocurrir en cualquier época del año, aunque en los periodos de vacaciones (verano, Semana Santa, Navidad, etc.) los robos en viviendas aumentan. ¿Sabes cómo marcan las casas para robar? Como lo oyes: los ladrones tienen varios métodos para señalar sus objetivos. Hoy te advertimos de algunos de ellos.
Desde luego podemos decir que los ladrones derrochan imaginación a la hora de pensar cómo marcan las casas antes de pasar a la acción. Y es que para poder tener localizadas las viviendas donde van a actuar, los ladrones utilizan las formas variopintas de dejar señales que les indiquen una entrada tranquila. Se trata de marcas que, la mayoría de las veces, pasan desapercibidas. Veamos el ingenio y la sutileza de algunas de estas marcas.
Claves para identificar las marcas que usan para robar casas
- Símbolos con tiza o similar: se trata de señales que suelen tener un código establecido para marcar si la casa está vacía temporalmente, si hay o no movimiento, etc. El marcaje suele ser de pequeñas dimensiones, discreto y poco evidente excepto, claro está, para aquel a quien va dirigido y sabe cómo interpretarlo. Normalmente los delincuentes utilizan este método en el exterior de casas unifamiliares, casas de pueblo, etc.
- Marcas junto al timbre del telefonillo: se trata de pequeñas rayaduras hechas con un objeto fino y punzante. La superficie del panel de timbres de una comunidad suele ser de material metálico, cromado o similar, lo que hace que las señales puedan hacerse de forma delicada. La marca advierte a sus autores de que el piso está vacío y por lo tanto el acceso será tranquilo.
Una forma de detectar esta práctica es cubrir el marco de los timbres con un adhesivo transparente y lo suficientemente grueso para que el metal no se vea dañado. La retirada de este material elimina las señales al ser detectadas por la persona encargada de la comunidad.
- Un pequeño trozo de palillo entre la puerta y su marco: los ladrones lo colocan en las puertas de los pisos elegidos y lo revisan con regularidad. Si el palillo está en el suelo la puerta se ha abierto en algún momento, lo que les indica que el piso está habitado y no es un buen objetivo.
- Un trocito de plástico transparente: es otra versión del método anterior. La revisión del plástico y su permanencia o no indicará si hay movimiento en el piso. En el caso de que indique que el piso está habitado, les puede servir de información sobre las horas más propicias a las que actuar.
- El hilo invisible: se trata de una versión todavía más sutil de las señales anteriores. El finísimo y pequeño hilo de silicona transparente se coloca uniendo puerta y marco aprovechando el ángulo que forman. Como si de una delicada tela de araña se tratase es prácticamente imperceptible. Igual que con el método del palillo y el plástico transparente, la ruptura o pérdida de este hilo indica que el piso está habitado. Su permanencia durante un periodo dilatado se traduce en que nadie entra y sale. La vivienda puede ser entonces un objetivo sencillo.
- Pequeñas bolitas de papel dentro de una cerradura de hueco ancho: las minúsculas bolitas se colocan con cuidado en el hueco de la cerradura de forma que puedan ser vistas por el ojo experto de quien las ha colocado. En el caso de que la cerradura haya sido utilizada, las bolitas se habrán colado dentro del hueco de la propia cerradura y dejan de ser visibles, indicando que en el piso habita alguien o, como mínimo, que hay movimiento en la vivienda.
Conocer cómo marcan las casas para robar nos da una idea de que los ladrones despliegan todo su ingenio para lograr su objetivo y hacerse con el botín. Merece la pena estar atentos a esos pequeños detalles que nos puedan indicar que nuestra casa está siendo “objeto de estudio” por parte de algún maleante.
Ante cualquier sospecha de rastro de estas marcas es muy importante poder advertir de ellas, lo que nos puede ahorrar un buen disgusto. Y como siempre, siguiendo los consejos de las fuerzas y cuerpos de seguridad, como las recomendaciones de la Guardia Civil, se lo ponemos más difícil a los delincuentes, evitando situaciones desagradables.
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